La Universidad de Glasgow: Un lugar para la inspiración
El camino desde casa (cualquier casa que esté a 2 km a la redonda) hasta la universidad le hace sentirse a uno como si estuviera rompiendo la barrera entre la realidad y la ficción, como en un cuento de hadas o, al menos, de magos. El campus está rodeado por el Parque Kelvingrove, que lo conecta con el museo más importante de Escocia (el Kelvingrove Museum -no os dejéis amilanar por este título, cualquiera que haya visitado una de las salas de "El Prado" puede creer estar en una de las exposiciones temporales de la estación de Nuevos Ministerios, aunque el edificio en sí no está mal-).
Al paisaje no le falta nada: edificios antiguos, árboles altísimos, río Kelvin, simpáticas ardillas, pájaros y perros, típicos taxis que circulan en dirección contraria - como debe de ser-, carril bici, hojas otoñales en el suelo... En fin, una gozada. Nunca ir a clase había supuesto semejante placer...
Si pudiéramos subir la temperatura un par de grados...
Esta foto es de una ardilla del parque (cuyo nombre probablemente sea Kelvin). No tienen ningún miedo a acercarse a las personas y seguramente pueden recorrerse todo el campus sin tocar el suelo :) . M, gracias por tu colaboración.
Una vez entramos en la calle principal del campus, University Avenue, nos topamos con una mezcla de edificios bastante pintoresca: edificios del siglo XV perfectamente conservados, otros con un estilo más funcional -y feo- de los años 60 (cuando la ciudad empezó a crecer de manera desmedida) y algunos muy modernos y coloridos que también merece la pena ver. Sin ir más lejos, en el número 1 hay una antigua iglesia que ha sido reformada y re-bautizada como "Sir Charles Wilson Building"que conserva la antigua fachada y estructura pero que, con las últimas tecnologías, ha sido transformada en un aula de seminarios en la que caben unas doscientas personas, y en la que aún se podría oficiar una misa (prometo foto).
Pero sin duda, la joya de la corona es el "Main Building" una gigantesca estructura del año 1451 en la que estudiaron personajes tan importantes como el mismísimo Adam Smith (para los que no lo sepan, es el padre de la economía clásica).
No sólo yo pienso que es inspirador. Si preguntas a cualquier alumno nuevo sobre la universidad te contará que es donde se rodó Harry Potter. Efectivamente, lo parece. Pero la universidad se negó a prestar su edificio más preciado (y principal atractivo turístico de la ciudad) para este fin, por lo que se utilizó la Universidad de Oxford. Sin embargo, J. K. Rowling sí se inspiró en Glasgow para describir la famosa escuela de magia, Hogwarts, en sus libros.
Sé que no es lo mismo, pero dejo aquí una imagen proporcionada por Google Earth para que os hagáis una idea de cómo es la universidad por fuera. Aquí también se puede ver el "ecosistema" que la rodea.
Como veis, el edificio tiene dos jardines interiores que, en realidad, son uno solo separado por unos soportales. Este es, sin dudarlo, mi sitio favorito de Escocia. No hay nada como descansar de las clases bajo los soportales mientras ves a los estudiantes pasar. Merece la pena visitarlo. Dejo pendiente subir una imagen de la universidad por dentro así como de las vistas del parque desde la parte trasera del edificio principal.